Capítulo 3: La converzación

Poco a poco iba gustándome estar en la academia, al principio me fue difícil pero luego me fui acostumbrando al ritmo, aunque habían veces en que me estresaba rápido, pero por suerte ya tenía un amigo que estaba siempre a mi lado para darme ánimos y ayudarme. Ya había pasado dos semanas desde que empezaron las clases, pero aún no había recorrido toda la academia, era muy grande y tenía muchos parques, así que un día le dije a Marco que me acompañe a la hora de salida a pasear por los alrededores, y nos fuimos, había una piscina porque también enseñaban natación e incluso un gran comedor, los alumnos se reunían en grupo y se sentaban en el pasto de los parques para estudiar o discutir sobre algún tema, mi amigo me dijo que siempre le había gustado estar en lugares así rodeado de árboles y plantas, por eso postularía a una carrera de ciencias, ese día hablamos mucho sobre las diversas carreras, le conté que era lo que yo realmente quería, él supo escucharme y comprenderme, esa era otra de sus cualidades que me gustaba de él, que siempre tenía las palabras correctas en el momento preciso, ese mismo día me conto algo sobre su enamorada, nos sentamos en un banquito  y no sé cómo salió el tema pero empezamos a hablar de los enamorados, primero le conté sobre mi relación de más de un año que tenía, le conté que era muy romántica detallista y que mi relación iba bien, él me miro y con una ligera sonrisa me dijo yo no soy romántico, ni muy detallista, aunque si me gusta escribir versos y poemas, no sé si eso cuente como detalle, con ella voy 4 meses, la conozco del cole, aunque estas últimas semanas desde que empezó la academia solo la he visto un par de veces un rato, no tengo mucho tiempo porque tengo que estudiar, solo espero que ella lo sepa entender, yo le dije: estoy segura que si te quiere mucho te va entender, no te preocupes no estás haciendo nada malo porque estas estudiando al contrario debería estar orgullosa de ti, y yo creo que si eres romántico, todo hombre dice no ser romántico pero yo solo creo que no quieren demostrarlo pero sí lo son, Marco se rio y me dijo: si tú los dices, pero yo soy la excepción jaja, no te burles que cuando lo demuestres me voy a reír yo, le dije xD, y nos fuimos al paradero a esperar nuestros carros, que por coincidencias de la vida iban por el mismo camino y recién nos dimos cuenta, él vivía más lejos que yo, pero podíamos tomar el mismo carro, así que desde ese día empezamos a irnos juntos.

Pasaron los días, casi iba a acabar enero, estábamos en pleno verano, carnavales y san Valentín estaban a la vuelta de la esquina, era inevitable escuchar hablar a los estudiantes sobre eso, y yo no era la excepción, le pregunte a Marco que le regalaría a su enamorada por San Valentín y me sorprendió su respuesta, me dijo: Yo no creo mucho en eso, esa fecha lo crearon más con un fin  comercial, no soy mucho de dar regalos, yo más escribo, yo le respondí: bueno respeto tu punto de vista pero creo que no esta mal celebrarlo, ya que muchas veces puede ser la oportunidad para reconquistar a la pareja, mayormente las mujeres que somos mas sentimentales esperamos algo y también hacemos algo para nuestros chicos, yo por ejemplo le hago una tarjeta o algo manual por que me gusta y siento que vale mas que algo comprado, sin embargo que tu le hagas versos también es un bonito detalle ya que es tu forma de expresarte, Marco me miro y me dijo con una ligera sonrisa en su rostro: Tú siempre tan detallista y romántica, eso es algo muy bueno en ti (Continuará).